«El sol de los venados», por Fabián Corral B.
Con el frío de la tarde, llega el sol de los venados. Las sombras se prolongan. Los cerros se iluminan y todo parece esperar. El sol se mete de a poco en el horizonte, se pierde y queda su testimonio en las nubes que vagan intensas, anaranjadas por el cielo de verano.