cómo hiere la sal de los caminos
cómo pesan los vientos del desierto
las ventanas tapiadas y los ojos
ausentes
el sol en las patas cansadas de los camellos
en los oasis yertos
cómo duelen las voces de los ahogados en la arena
de los que imploran un pedazo de cielo ennubecido
cómo lacera su agonía inútil
cómo sangra la memoria del dolor en los pinceles