Es la historia de uno de esos imperios económicos que surgió y se consolidó en los años veinte y treinta del siglo pasado en los Estados Unidos, en la época previa y posterior a la gran depresión...

Las grandes fortunas han dominado el mundo desde tiempos inmemoriales. Los imperios más representativos de la antigüedad lo hicieron amparados en su poder económico y en su consecuente fuerza bélica, cuyo objetivo primordial fue la expansión y la conquista de nuevos territorios. A partir del siglo XX, la URSS, Inglaterra, Estados Unidos y China, en épocas y momentos diferentes, consolidaron su poder y hegemonía socio-política en buena parte gracias a las inmensas fortunas que se han gestado y acumulado en sus economías.

Fortuna es la historia de uno de esos imperios económicos que surgió y se consolidó en los años veinte y treinta del siglo pasado en los Estados Unidos, en la época previa y posterior a la gran depresión. De hecho, la parte medular de la historia se refiere a Andrew Bevel, un multimillonario neoyorkino de familia acaudalada que habría influenciado de tal forma el mercado de valores que mucha gente llegó a pensar que el desplome bursátil de 1929 lo provocó él directa o indirectamente o que, al menos, supo sacar ventaja de la desgracia para incrementar su fortuna de modo estratosférico.

Pero la realidad que está detrás de la creación de esta magnífica novela es tanto o más curiosa que la historia misma, pues su autor es Hernán Díaz, un argentino que debió abandonar su país en 1976 como consecuencia del golpe militar, y que se exilió en Suecia hasta el retorno de la democracia cuando regresó a Argentina con su familia. Para entonces, a Díaz lo había inoculado el virus de la literatura que lo llevó a continuar sus estudios en Londres y en Nueva York. Fue allí, en esas ciudades, donde Hernán Díaz se enamoró de la lengua inglesa, que se convertiría más adelante, cuando logró finalmente dominarla, la lengua en la que escribiría sus obras.

Y es que Fortuna, esta obra inconmensurable y ambiciosa, fue escrita originalmente en inglés (bajo el título Trust) y, tras su publicación, recibió el premio Pulitzer 2023 en la categoría de ficción. Pero, además, Fortuna fue incluida en las listas de las mejores novelas del año 2022 en los Estados Unidos. Entre los lectores que la recomendó especialmente estuvo el presidente Barak Obama.

La novela de Hernán Díaz consta de cuatro partes en las que el mismo número de voces narran esta historia desde sus ángulos particulares. Así, la primera parte trata de una novela corta inmersa dentro de la gran novela en la que se relata la vida de un personaje basado en Andrew Bevel, escrita por un escritor no autorizado a escribir tal libro; la segunda parte es la versión autobiográfica de Bevel, en la que muestra su oposición y rechazo a esa novela que ha sido publicada sin su autorización en la ciudad de Nueva York; la tercera parte contiene las memorias de una secretaria ejecutiva a la que Bevel contrata para contar su historia y desmentir de esta forma al escritor al que odia; y, en la cuarta y última, el lector descubrirá los fragmentos de diarios de la esposa de Bevel, que además de enlazar las versiones anteriores o de contradecirlas categóricamente, cerrarán la obra de forma magistral.

Fortuna es la historia de un hombre excéntrico, brillante y misterioso que llegó a dominar el mercado de valores, las adquisiciones y ventas de acciones y compañías con una virtud premonitoria que arrancaba todo tipo de sospechas y también de elogios, pero como una buena novela total, es además un libro sobre varias generaciones de una familia multimillonaria y su influencia en el mundo de los negocios, de la política, de las artes y del poder, escrita desde la frágil y efímera existencia de la condición humana.

Este artículo apareció en la revista Forbes.

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