He lamido por largo tiempo
al cachorro
Parece que sólo así
sus músculos
se acostumbran al aire
y sus formas
dejan de ser arbitrarias
He golpeado
a los adultos
que se acercan a olfatearlo
o quieren tomarlo
en brazos
Nada nuevo hay
bajo el sol
a otras crías sus manazas
No quiero dormir
porque puede que la muerte
me someta
en el instante en que
mis ojos cierre
Tantas otras madres
recién paridas
reventadas de tanto abrirse
a la existencia
mueren cazadas
por la noche
aun cuando en el sueño
todo aparentara
ser apacible
y la vida
eterna
Fuente: Zenda.