XIII
Los hijos:
Prolongación de mis días
Mi memoria no se quedará sola
La esposa tejerá cartas
Y singladuras hechas de palabras
Todo se romperá
Todo lo volverá a escribir
La lección será bien aprehendida:
El lenguaje es como el mar
Un ovillo de letra y agua
Que vuelve a empezar cuando se acaba
XXXVII
Viajé un par de milenios
Con mi Capitán Odiseo
Me fue bien
Aunque mis pies extrañaban la tierra
Y mi cabeza el equilibrio.
De ese hombre aprendí
Que somos pasajeros fugaces
De un barco universal
Que después del último aliento
Lo único que importa
Es haber pisado muchos puertos
Haber conocido mucha gente
Haber leído bien cuatro o cinco libros
Lo demás es invención
Cuentos para contarlos a las sirenas
LXXVIII
Ciudades submarinas
Aquí yacen las réplicas
De todas las metrópolis
Cada ciudad tiene su gemela
Que surgirá desde el fondo
Cuando la original se devaste
No es difícil encontrar
Arquitecturas de coral
Barrios de roca innominable
Ciudades de silencio.