En un comienzo, / todos creemos / representar despreocupados / esta alegre farsa / a la que hemos sido invitados. / Pero / cuando menos lo esperamos, / no podemos arrancarnos el disfraz, / el maquillaje pegado / a nuestro rostro, porque entonces...

En un comienzo,
todos creemos
representar despreocupados
esta alegre farsa
a la que hemos sido invitados.

Pero
cuando menos lo esperamos,
no podemos arrancarnos el disfraz,
el maquillaje pegado
a nuestro rostro, porque entonces
quedaríamos desnudos y sin cara.

El papel
nos ha reemplazado.

¿Pero
es que había algún otro?

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