Tengo celos ¿no sabes? Tengo celos
de todas las mujeres que has amado:
de las bocas en flor, donde has saciado
la locura de todos los anhelos.
En mis lúgubres noches de desvelos,
me atormenta el recuerdo despiadado
mientras mi corazón apasionado
quiere en vano luchar con sus recelos.
Cuando poso en tu faz mi boca ardiente,
me parece que cruzan por tu frente
las risueñas visiones del pasado.
¡Odio entonces tus brazos vigorosos
y aborrezco tus ojos luminosos
donde tantas pupilas se han mirado
Fuente: Poesía breve.